Ya hemos denunciado en publicaciones anteriores, y que pueden ver aquí, la cantidad de irregularidades presentadas en el Consulado de Colombia en la ciudad de Madrid en España, desde que en abril del presente año asumió su dirección el Sr. Javier Darío Higuera Ángel.
La mayoría de esas irregularidades las hemos podido dar a conocer públicamente, no precisamente por la colaboración del mencionado Cónsul y de la Cancillería, pues como también lo venimos denunciando, lo que han hecho es ocultar toda la información y documentos que más han podido con el argumento de que son reservados, pero que en COLEXRET los hemos obtenido extraoficialmente desde el inicio de estas investigaciones.
Leyendo hasta el final podrán saber el por qué de la Vergonzosa y humillante fila para la atención en el Consulado colombiano en Madrid.
Consulado colombiano en Madrid retrocede 20 años.
Pero ya no es solo por que la información o documentos solicitados sean reservados, sino por las evasivas del Cónsul Higuera para responder a nuestras peticiones, privándonos de alguna manera de brindar oportunamente a nuestros lectores una información más amplia y detallada de lo que acontece internamente en nuestro Consulado en la capital madrileña, dando lugar a sospechas de que algo extraño y hasta delictivo podría estar sucediendo.
Desde hacía más de quince (15) años, los colombianos residentes en la Circunscripción de su Consulado en Madrid – España, no tenían que hacer largas y humillantes filas al sol, al frío y al agua, esperando que les concedieran la entrada a la sede consular para la realización de sus respectivos trámites.
Hoy, tristemente vemos que se ha retrocedido por lo menos 20 años, no solo en la complicación para obtener una cita vía Online, sino por las largas filas (más de 2 calles), de usuarios que van a realizar sus trámites en la nueva sede (C/de los Madrazo 8), y no pueden ingresar ni siquiera al pasillo que da acceso a las instalaciones del Consulado.
Descontento ciudadano por las largas filas en el Consulado de Colombia en Madrid.
Esas largas e incómodas filas han originado la «sublevación» de los usuarios, quienes en su pleno derecho han reclamado, tal vez de una forma algo brusca en palabras, y el Sr. Cónsul Javier Higuera ha llamado a la Policía, haciendo crecer más la vergüenza de lo que él mismo ha provocado.
Cuando nuestro «infiltrado» quiso sacarle información al respecto, se escudó nuevamente en el argumento que le ha servido para tapar su inoperancia, y es que es información reservada.
Causa hasta risa algo que se ha hecho público, que lo han conocido decenas de personas, y de lo que tenemos imágenes, nos venga a salir con el «cuentico» de que se trata de algo secreto.
El único responsable es el Cónsul Javier Darío Higuera Ángel.
La imposibilidad de que los usuarios permanezcan en el pasillo que da acceso al interior de la sede consular, para al menos, hacer menos vistosa la vergüenza y humillación de ver esas largas filas, es única y exclusivamente culpa del Sr. Javier Darío Higuera Ángel, quien por simple capricho no lo permite.
Volvimos a infiltrar a nuestro «espía» (Verlo aquí), en el Consulado colombiano en Madrid, intentando obtener información oficial de lo que acontecía con el tema de las filas, y a continuación les ofrecemos el resultado.
El Cónsul Javier Higuera le dijo a nuestro «espía», que las filas en el exterior del Consulado obedecen a que tanto el pasillo como demás espacios para ingresar a la sede, son «zonas comunes o comunales», y que por ello no pueden permanecer personas allí; explicando que, «El uso de las áreas de acceso al inmueble donde funciona el Consulado se rige por las normas internas de seguridad y los acuerdos de administración del edificio».
No sabemos de dónde se ha inventado eso el Cónsul Javier Darío Higuera, o mejor si, es una de sus invenciones para convencer a la Cancillería que debe cambiarse nuevamente el Consulado a otro lugar. No olvidemos que el primer objetivo del susodicho recién posesionado en el cargo, fue el de trasladar la sede a otro sitio.
Ese lugar que él busca, es uno por allá en una quinta o sexta planta, en un exclusivo sector de Madrid (con lo baratos que están los alquileres en esa ciudad, no?), donde pueda entrar a un parqueadero en su nuevo vehículo de alta gama sin que nadie lo vea. Que su oficina sea de lujo, con baño privado y demás comodidades de un Rey. Que nadie sepa si está en el Consulado, o pavoneándose fuera haciendo relaciones públicas. Él busca un lugar que se ajuste más a su aparente status social que a la comodidad de los usuarios.
A Javier Darío Higuera Ángel le importa un pepino el bienestar ciudadano, él busca solo el suyo. No es un funcionario que construya en pro de la ciudadanía, sino que destruye lo bueno que se le pone a su paso, simplemente porque no le gusta, porque está acostumbrado donde llega a hacer lo que se le da la gana sin ningún tipo de control.
Al Cónsul Javier Higuera no le gustó el Consulado, tampoco el vehículo oficial, y mucho menos la residencia asignada.
No olvidemos que recién recibió el Consulado no le gustó, y comenzó a ponerle peros por todas partes, llegando incluso a pegarse de la inspección realizada por la firma GAMMA, sin ninguna competencia donde da claramente a entender que como están las instalaciones, es un peligro de muerte para los usuarios.
Tampoco le gustó el vehículo que tenía asignado como uso oficial, el flamante automóvil marca BMW, modelo 5C31-520D, chasis WBA5C31070D043107, color negro, tapicería en cuero Dakota, y demás lujos, adquirido en el mes de marzo de 2014, y a punta de mentiras, con la complicidad de la Canciller Yolanda Villavicencio Mapy, consiguió le autorizaran la compra de uno nuevo valorado en casi TRECIENTOS MILLONES ($300.000.000) de pesos. (Ver aquí).
Y la residencia consular, asignada al Cónsul de turno y su familia, en donde se paga un alquiler por encima de los CINCO MIL QUINIENTOS (5.500€) euros mensuales, en un exclusivo sector de la capital española, tampoco le gustó, y anda desesperado buscando otro sitio, a lo mejor más in, acorde con su supuesto status social, para que la «mami» Yolanda Villavicencio vuelva y autorice un gasto inoficioso, en contra de las políticas de austeridad del gobierno del Sr. Gustavo Petro.
En ningún documento se establece la prohibición de hacer la fila en el pasillo que conduce al interior del Consulado.
Volviendo al tema central de la sede consular, hemos revisado uno a uno los documentos que tenemos en nuestro poder, incluso el contrato de alquiler del Consulado, y no se aprecia por ninguna parte prohibición alguna para ocupar el pasillo y demás «zonas comunales» que dan acceso a esas instalaciones.
Es más, por ahí no entra absolutamente nadie más que resida en las edificaciones aledañas al Consulado, por lo que el acceso es exclusivo para lo usuarios de este.
Reiteramos, no existe en ningún escrito, donde la Administración del edificio prohíba el uso de esos espacios, salvo que ahora resulte el Sr. Cónsul Higuera con un papel que así lo diga.
Por qué se ha originado todo eso?, pues porque el Sr. Javier Darío Higuera Ángel no es una persona negociadora, y mucho menos conciliadora, no cae bien ante nadie, dada su postura prepotente de oligarca «dedo para´o», y en vez de conciliar, lo que ha hecho es ponerse en plan ofensivo con la Administración de la edificación.
Nuestro «infiltrado» no pudo conseguir que Higuera brindara mayor información, pues argumenta que es competencia de la Administración o Junta de propietarios que maneja esa edificación, y que hace parte de las aledañas a la misma.
Otra patraña más del Cónsul de autos, pues los interrogantes que le planteamos fueron los siguientes, y como se aprecia, él mismo puede responderlos, solo que no se le da la gana de hacerlo (¿Qué sigue ocultando?):
- Qué otras personas diferentes a los usuarios del Consulado acceden por esa misma entrada para llegar a sus residencias?
- En qué documento se establece la prohibición a que los usuarios puedan hacer la fila en el pasillo que conduce al interior de las instalaciones del Consulado, para el ingreso al mismo.
En este caso no se critica el hecho de que se produzcan largas filas, pues en la anterior sede del Consulado en Madrid había también esa complicación, con la gran diferencia que en aquel sitio se podía estar bajo techo, no a la intemperie como sucede ahora.
Además, si Higuera quisiera, si pensara realmente en el bienestar ciudadano y no en el propio, podría permitir que los usuarios hicieran un par de filas en el pasillo que conduce al interior de las instalaciones de ese Consulado, y si es cierto, (para nosotros es otra mentira más a las que nos tiene acostumbrado ese Cónsul), que la Administración del edificio lo prohíbe, reiteramos, para eso existe el diálogo, el poder de negociación, de conciliación y convencimiento, pero por lo visto Javier Darío Higuera carece de todo eso.
«Permitir una injusticia es abrir el camino a las que siguen».
Sr. usuario del Consulado de Colombia en Madrid – España, si va a realizar alguna diligencia, y tiene que «mamarse» cualquier cantidad de tiempo en las afueras de las instalaciones del Consulado, ahora en invierno bajo un frío polar inaguantable, debe saber que el único responsable de ello es el Cónsul Javier Darío Higuera Ángel, y que Ud. está en su pleno derecho de sublevarse ante esa situación.
No importa que el «oligarca» ese llame a la policía, guardia civil, bomberos, migración, ejército, fuerza aérea, organismos de inteligencia, etc., recuerde las palabras de Willy Brand, «Permitir una injusticia es abrir el camino a las que siguen».
No le pedimos intervención a la Sra. Canciller Yolanda Villavicencio Mapy, pues al parecer ha terminado por convencerse que se debe cambiar el Consulado a otro lugar; bien para darle gusto al Sr. Higuera, o para ella, si es que algún día logra cumplir su sueño de ser Cónsul General Central de Colombia en Madrid – España.
De ser el mejor Consulado de Colombia en el mundo, hoy es el peor.
Lo que cada día queda más claro con las actuaciones de Higuera Ángel, es que después de ser en los últimos años, el de Madrid, el mejor Consulado de Colombia en el mundo, haya pasado a estar entre los peores. Todo porque el actual Cónsul solo piensa en su bienestar, en gastarse el dinero de los contribuyentes en lujos para su beneficio personal, y que supuestamente le dan imagen ante la sociedad. Tristemente, su Jefa, la Sra. Canciller Yolanda Villavicencio Mapy le está alcahueteando todo.
«El carecer de luz propia obliga a algunos a rodearse de lujos para poder brillar» (Ricardo Marín Rodríguez, un afortunado millonario sin dinero).
Sr. Embajador Eduardo Ávila Navarrete, qué tal si dentro de su competencia y facultades legales le mete el hombro a ese asunto, y así como lo hemos visto conciliar y ganar a favor de los ciudadanos en otras negociaciones, consigue que los usuarios de nuestro Consulado puedan al menos ingresar bajo techo a esperar que los hagan seguir a las instalaciones del mismo para ser atendidos?
Estamos convencidos Sr. Avila, que si Ud. interviene más directamente en el asunto, muchas situaciones en el Consulado de Colombia en Madrid mejorarán. Sencillamente porque Ud. si siente en carne propia el dolor de los demás; porque tiene sentido y sentimiento social; porque es un funcionario con excelentes capacidades de dialogante, negociador y conciliador. Y porque Ud., a diferencia de otros, no solo es inteligente, sino que utiliza esa inteligencia en pro de la ciudadanía.


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