Los problemas de los servicios consulares colombianos alrededor del mundo siguen siendo objeto de análisis por organizaciones, investigadores y medios de comunicación como esta casa periodística COLEXRET.
Es urgente que la cancillería sistematice estos aportes y aborde soluciones, máxime en estos momentos cuando la diáspora necesita decidido apoyo en su cohesión social, frente a campañas xenófobas y discriminación institucionalizadas en el exterior.
La crisis de “Cohesión social” en los consulados de Colombia.
Debe preocupar, que en la mayoría de los países donde hay mayor cantidad de migrantes colombianos, están surgiendo políticas anti migratorias y reducción de derechos a los ciudadanos que vienen del exterior, relacionando migración con falsos estereotipos como:
- “culpables del incremento de la delincuencia”, cuando no es cierto,
- “culpables del colapso de servicios sociales”, cuando sus cotizaciones en seguridad social ayudan a pagar las pensiones y facilitan el recambio de trabajadores y son el colectivo que más aporta al cuidado de personas dependientes.
La repetición de estas afirmaciones ha generado un ambiente antinmigración impulsado por medios de comunicación y partidos antinmigración que con esto han conseguido ganar elecciones.
Es urgente entonces formar y sensibilizar a los migrantes, en cómo enfrentarse a este ambiente excluyente que se está extendiendo en los niveles laboral, educacional y de servicios sociales.
Es necesario potenciar cognitivamente a los migrantes para seguir avanzando en el reconocimiento de sus aportes donde están viviendo y la gran capacidad de resiliencia que tienen los hogares que conforman.
En esa dirección, consolidar redes de apoyo sociedad civil, delegaciones de Colombia y entidades locales para mejorar su desarrollo humano en el país donde viven, además de consolidar su relación con Colombia.
Precisamente, la cohesión social se refiere a la capacidad de una Comunidad para mantenerse unida, compartir valores, fomentar la solidaridad y trabajar en conjunto para el bienestar común.
Incluye aspectos como la confianza entre los miembros, la inclusión, la participación y el respeto por la diversidad.
En el contexto de la migración, la cohesión social ayuda a los individuos a adaptarse al nuevo entorno y a mantener vínculos con su país de origen.
La necesidad de una agenda de cohesión social por parte de Cancillería construida con sus diásporas en cada delegación diplomática y consular:
La Cancillería de Colombia tiene embajadas y consulados en el exterior con todas las capacidades institucionales para desarrollar agendas de cohesión social con sus diásporas para realizar diagnósticos y propuestas que superen problemas de cohesión social. Con ello favorecer la protección, formación e inserción del colectivo.
A nivel de talento humano la entidad cuenta con cargos de altísimo rango como embajadores, ministros plenipotenciarios, ministros consejeros, funcionarios de carrera diplomática y consular competentes para promover, cuanto convenio o contrato sea necesario, para la mejora de calidad de vida de sus connacionales, estando autorizados para actuar en cada país, al tenor de la convención de Viena.
Igualmente, las cancillerías tienen un gran “know how o un saber institucional” acerca de ámbitos como enfoque de derechos humanos, derecho internacional humanitario enfoque diferenciales, enfoques interseccionales, desarrollo humano. Dado que sus funcionarios han sido delegados por el gobierno para firma de instrumentos internacionales, relacionados con estos temas.
Se trataría entonces, que la cadena de mando aplique los compromisos y aprendizajes adquiridos en los países donde hay delegaciones a través de la cooperación interinstitucional.
A continuación, se van a mencionar los problemas de cohesión social en la interacción y servicios a la diáspora, recogiendo las valoraciones realizadas en diferentes investigaciones, integrándose los aportes realizados en dos encuentros del exilio, donde han participado más de 50 asociaciones y plataformas de migrantes.
1. Procesos de atención a connacionales:
Se refiere a las funciones notariales y de facilitación de tramites por los consulados. En estos temas la sociedad civil ha coincidido que los mayores problemas son:
- En la digitalización de los servicios consulares persisten problemas técnicos en las plataformas en línea; se denuncian dificultades en los sistemas de cita previa; caídas frecuentes de las páginas web. lo que obliga a connacionales a pagar tramitadores que gestionen tecnológicamente sus citas que suelen estar saturadas y, en ocasiones, la espera para obtener un turno puede demorar semanas.
Ello repercute en: Falta de interoperabilidad entre consulados y entidades en Colombia; Lentitud en la gestión de trámites como la expedición de pasaportes, cédulas de ciudadanía, registros civiles y poderes notariales.
- Hay situaciones de discriminación por no estar adaptada la web a personas con discapacidad y porque solo se ofrece atención sin cita para adultos mayores. Es importante recordar que algunas personas necesitan acompañamiento para la cita, por lo que se requiere facilitar este apoyo, permitiendo que asistan sin cita los adultos mayores y personas con discapacidad.
- Hay falta de personal y recursos en muchos consulados colombianos que operan con plantillas reducidas y recursos limitados, lo que repercute directamente en la capacidad de atención.Esta carencia se traduce en largas colas, tiempos de espera excesivos y, a menudo, en una atención menos personalizada.
- Problemas de comunicación entre los consulados y los ciudadanos para periódicamente evaluar la atención e implementar soluciones.Los canales oficiales, como páginas web y líneas telefónicas, pueden no estar actualizados o no responder a las consultas, dificultando el acceso a la información sobre requisitos, procedimientos y horarios. No se hacen evaluaciones anuales sobre servicios consulares.
- La atención de casos de emergencia no son lo ágil y efectivo que se espera. En situaciones de emergencia, como pérdida de documentos, detenciones o problemas de salud, fallecimientos, la respuesta consular puede ser lenta o insuficiente.En ocasiones, los consulados carecen de protocolos claros o de la capacidad de actuar con la urgencia requerida por el caso.
- Existe dificultad para acceder a servicios en zonas alejadas. Los consulados suelen estar ubicados en grandes ciudades, lo que obliga a los colombianos residentes en zonas alejadas a realizar largos desplazamientos. Aunque existen consulados móviles y jornadas itinerantes, su frecuencia es limitada y, en muchos casos, no cubren toda la demanda.
- Costes elevados de algunos trámites consulares para los ciudadanos, especialmente para aquellos con recursos limitados.
2. Procesos de participación ciudadana:
2.1 Programación de reuniones eventos, fechas emblemáticas, programaciones culturales y deportivas:
Hay una alta participación de connacionales en eventos presenciales y reuniones con sociedad civil y asociaciones, dado el interés de la diáspora en participar de espacios informativos y que generen satisfacción.
Los problemas de cohesión social suceden por no aplicación de “Acciones afirmativas”, y no implementación del “Diseño universal para todos” en la organización y desarrollo de estos eventos. Por ejemplo, facilitar transmisiones hibridas para que personas distantes al consulado o con discapacidad puedan participar. De otro lado tener en cuenta el enfoque diferencial en acceso, ubicaciones, etc.
2.2 Promoción de participación en mesa nacional de Migraciones:
La resolución sobre la mesa, dictaminó como responsabilidad de consulados y embajadas la difusión de participación en las votaciones de la mesa y facilitar la integración de colectivos vulnerables.
Esto no se evidencio en muchos países e inclusive algunos multiplicadores al ser asignados ocupaciones diferentes no pudieron dedicarse a la promoción de la mesa. No se integró como colectivo diferencial, a las personas con discapacidad en el formato de inscripción.
2.3 Participación en mesas de trabajo:
No se evidencian evaluaciones del programa Colombia nos une en especial las mesas de trabajo. El trabajo en estas no se fundamenta en el desarrollo de módulos técnicos que promuevan la cohesión social.
Otras entidades públicas y privadas diseñan un protocolo de acompañamiento pedagógico dando entrenamiento técnico a miembros de las mesas con módulos sobre cohesión social, prevención y afrontamiento conflictos, reuniones eficaces, trabajo en equipo, planeación estratégica.
Desafortunadamente desde que existe el programa Colombia nos une, la metodología de forma reiterada es:
Llega un nuevo cónsul se promueve la conformación de mesas temáticas, se inscriben las personas y se ofrece el espacio del consulado para reuniones y no se implementa en todos los consulados módulos diseñados por la cancillería.
Como es normal empiezan a surgir diferencias en definición y planeación de objetivos, manejo de reuniones eficaces, afrontamiento de conflictos. Dichas situaciones hacen que las mesas se desarticulen, sin que se agende por parte del programa Colombia nos une, ningún espacio para hacer diagnósticos y propuestas de mejoramiento de las mesas.
Tampoco se conocen evaluaciones técnicas de avances en cohesión social de las mesas de trabajo realizadas con participación de la sociedad civil en cada consulado.
Se hace necesario Resignificación de las mesas de trabajo como espacios multiplicadores de cohesión social entre la diáspora colombiana.
2.4 Las limitaciones de los multiplicadores del Programa Colombia nos Une:
En muchos consulados los multiplicadores no pueden dedicarse con exclusividad a este campo porque según demandas de trabajo deben cumplir otras funciones administrativas. Sus contratos muchas veces duran menos de un año, renovándose a través de empresas temporales intermediarias que les contrata como servicio de limpieza en países como España.
¿La Agenda de Cohesión Social para cuándo?
La Cancillería debe reconocer que la no solución de estos problemas recurrentes, en momentos de xenofobia institucionalizada, genera una crisis en cohesión social que debe atenderse urgentemente. Por ello antes de terminar 2025, cada Misión diplomática y consular debería hacer una evaluación integral de servicios y promover una agenda de cohesión social frente a la xenofobia institucionalizada
Por:
Julián Castrillón
Doctor en ciencias económicas y empresariales,
Universidad complutense de Madrid – España.
PHD Economía UCM
NOTA: Más opiniones de este columnista, ingresando aquí.
Comentarios