Al director de esta Casa Informativa, Ricardo Marín Rodríguez, solo eso le faltaba, que luego de habérsele vulnerado en infinidad de ocasiones su Derecho de petición, por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores, afirmado en gran cantidad de sentencias judiciales, tal y como lo pueden comprobar en nuestro artículo “Tutelas contra la Cancillería colombiana han sido todo un éxito”, salieran con la historia que es por culpa suya que esa entidad comete los errores que reporta en las respuestas que le ofrece.
Así de plácidamente lo anuncia en respuesta dada precisamente a una orden judicial donde se le ordenó responder en 48 horas algunos interrogantes relacionados con el Fondo Especial para las Migraciones, y la conceptualización de “vulnerabilidad” de familiares de colombianos fallecidos en el exterior, para que a través del Fondo Especial para las Migraciones se sufraguen los gastos de repatriación de los restos del fallecido.
En la respuesta que nos ofreció la Cancillería nos dio a conocer una información errónea. Nos indicó citas jurídicas inexistentes para responder uno de nuestros más importantes interrogantes, y de ahí que la Justicia dentro de la Acción de tutela que le instauramos por ello, la obligó a rectificar con los datos exactos.
(De gran interés: ¿Se avecina otro caso de impunidad en la Cancillería colombiana?.)
Cancillería responsabiliza a los ciudadanos de sus errores.
Pero vean como responde lanzando responsabilidades contra quien le presentó el derecho de petición:
“Sin embargo, a pesar de consignar que se respondieron “cada uno de los interrogantes propuestos” por Usted, surgió la inquietud sobre la pregunta N. 3 que hace referencia al numeral 8, literal g del artículo 5° de la Resolución 1726 del 2018, ya que el artículo 5° no tiene numerales, ni literales y tampoco va en concordancia con lo preguntado. Eso es verdad.”
Aquí es donde culpa a nuestro director Ricardo Marín Rodríguez, de tan garrafal error (única y exclusiva responsabilidad de la propia Cancillería), respondiendo que, “Solo fue un error involuntario, humano y comprensible de digitación ante las innumerables peticiones y tutelas de su parte.” (Resaltado fuera de texto.)
(Le puede interesar: “La justicia niega a la Cancillería declarar abuso, y extralimitación en derechos de petición.”)
Culpando a quienes hacen valer sus derechos a la “Participación y Veeduría Ciudadana”, “Control político”, “Petición e Información” es como la Cancillería colombiana pretende tapar la falta de observación, atención y cuidado de sus funcionarios para responder las peticiones ciudadanas.
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