Posible acoso laboral, y despido improcedente, en el Consulado colombiano en Londres.
El pasado 29 de octubre, en nuestra publicación “Cuestionamiento de Cancillería a la veeduría que se haga a un Consulado en donde no se resida”, dábamos algunos avances de un caso sucedido en el Consulado colombiano en Londres (R. Unido), por posible acoso laboral y despido a una de sus trabajadoras encontrándose de baja médica.
Hemos avanzado bastante en esa investigación, pero por respeto, y a petición de la afectada, preferimos esperar un poco más, hasta tanto no conozcamos algunas decisiones judiciales pendientes, y ella recopile más detalles sobre su caso para entrar a hacerlo público.
Caso similar el que les contaremos en este artículo, pero antes rogar a los ciudadanos que ¡Denuncien por favor! cualquier hecho que consideren vulnera sus derechos en el exterior, a través de sus Consulados. Denuncien y/o informen sobre la atención y servicio que les brindan cuando acuden a ellos en búsqueda de alguna solución en situaciones de alta vulnerabilidad. Así mismo, cuando se dirijan a esas sedes consulares para la realización de cualquier trámite.
Pueden hacer sus denuncias a través del enlace oficial directo del Sistema PQRSDF de la Cancillería colombiana. O contacte con nuestra Plataforma COLEXRET, al correo electrónico direcciongeneral@colexret.com, y dándonos a conocer su caso, lo orientaremos sobre el procedimiento a seguir para realizar la respectiva denuncia ante la autoridad que corresponda, y hacerlo público en este medio informativo. Si lo desea la publicación se hará con absoluta reserva de su nombre y/o demás datos personales.
Supuesto acoso laboral y vulneración de derechos en el Consulado colombiano en México.
Denuncia contra Cónsul colombiano por acoso laboral y vulneración de derechos acaba de hacer pública, y nos la hizo llegar directamente, una extrabajadora que desempeñaba el cargo de “Multiplicadora de Colombia Nos Une” en el Consulado de Ciudad de México D.C., de la que, a petición de su abogado nos reservamos dar el nombre.
Nos dice la denunciante que su objetivo es hacer pública la situación de acoso laboral y violencia de género de la que fue víctima durante el ejercicio de sus funciones como Multiplicadora de “Colombia Nos Une” en el Consulado General de Colombia en México.
(Ve aquí cómo “Cónsul colombiana denunciada retrocede, y tuvo que agachar la cabeza ante sus errores.”)
Y gran razón le asiste cuando nos dice que no es solamente denunciar a un funcionario quien a través de su poder ejerce malos tratos, sino evidenciar cómo las instituciones permiten estas situaciones sin actuar conforme a los procedimientos legales o garantes de los derechos laborales de las personas trabajadoras y migrantes.
“Lo que era una oportunidad de trabajar en el gobierno del CAMBIO y de construir con la comunidad una agenda de transformación, terminó por convertirse en una pesadilla, en una clásica historia de abuso de poder en donde quienes asumen cargos públicos, terminan replicando las lógicas clasistas, machistas y discriminatorias de todos los que por décadas han hecho parte del elitista mundo de la diplomacia”; nos dice la denunciante.
La inaceptable situación que denuncia la afectada protagonista de este hecho, evidencia otras graves falencias al interior del Ministerio de Relaciones Exteriores, entre las que se resalta la falta de interés para realizar transformaciones en sus políticas públicas, en la atención a los connacionales en el exterior y la mala organización del Grupo Interno de Trabajo de Colombia Nos Une; las pésimas condiciones laborales que el Ministerio impone a quienes son migrantes y el irrespeto por sus derechos, se hace más enfático cuando omiten sus propios protocolos de atención en casos de acoso laboral y discriminación.
Por ello la importancia no sólo de alzar la voz frente a estos casos, sino de aportar desde una mirada pedagógica para que no sigan sucediendo.
Valiente y firmemente nos expresa la denunciante que “Si las instituciones no responden de forma asertiva, es nuestra obligación como personas que luchamos por una sociedad diferente, no callar ni permitir estos abusos.”
(Vean aquí como “Colombia Nos Une mintió a la justicia intentando conseguir un fallo a su favor que no logró.”)
Cónsul colombiano en México es denunciado públicamente por acoso laboral.
La denuncia por acoso laboral y vulneración de derechos, es puesta directamente contra Andrés Camilo Hernández Ramírez, Cónsul General de Colombia en México, así:
Esto comienza, cuando convocados por un proyecto de acción que pretendía afrontar los retos del Plan Nacional de Desarrollo, un grupo de personas fueron seleccionadas en diferentes países para ejercer el cargo de multplicador/a del Grupo Interno de Trabajo Colombia Nos Une, una subárea de la Dirección de Asuntos Consulares del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Este programa fue creado con el objetivo de acompañar a los connacionales y mejorar sus condiciones de vida en el extranjero, pero tiene poca relevancia en las agendas consulares, que no dan la suficiente importancia a los temas sociales, de derechos humanos, de acompañamiento al migrante, a las violencias de género, a la educación, el trabajo, emprendimiento o al fortalecimiento de la comunidad.
No expresa tácitamente la denunciante que, “El ejercicio de mi trabajo como multiplicadora se dio en el marco de una deficiente estructura organizativa dentro del Ministerio, en donde los lineamientos de mi trabajo derivaron en: “Lo que el cónsul diga”, “La foto para redes” y un reiterativo “para eso no hay presupuesto”, es decir que los objetivos del programa dependían y siguen dependiendo de la discreción del Cónsul.”
Después de un interesante proceso de selección por méritos, fueron publicados los resultados en donde nuestra valiente denunciante fue seleccionada como multiplicadora para el Consulado colombiano en México.
Es conocido que la convocatoria omitió condiciones importantes para la contratación (que debe ser a través de un tercero), mismas que tuvieron que asumir casi todos los nombrados para estos cargos, a contratiempo.
Denuncia igualmente la afectada que “Andrés Camilo Hernández Ramírez, Cónsul General de Colombia en México, me responsabilizó de no tener estos requerimientos y desde el día uno se refirió a mí como un “problema” y una molestia que fácilmente podía resolverse “contratando a cualquier otro”.
Continúa diciendo que, “Quise pensar que su actitud arrogante y discriminante tenía que ver con su inexperiencia, porque estaba recién nombrado y llegado al país, e ignoraba los complejos trámites a los que se enfrenta una mujer migrante en búsqueda de trabajo. A Colombia Nos Une pareció no importarle mucho el problema de una convocatoria que no estableció claramente las reglas para la contratación.”
Nos cuenta la afectada que el ambiente de malestar frente a su ingreso comenzó a ser más notorio, el Cónsul dio por un hecho que su contratación se había realizado por “encima de su autoridad” (aunque el nombramiento de los multiplicadores es competencia de Colombia Nos Une, pero en la práctica muchos cónsules son los que ejercen el poder), por lo que nunca estuvo conforme.
(Deberías leer “10 años en pro de los colombianos en el exterior.”)
Conocimos igualmente en palabras de la denunciante, que su trabajo fue cada vez más complicado, y que se enfrentó a actitudes de hostigamiento, menosprecio, discriminación y acoso. Cuenta que el Sr. Cónsul Andrés Camilo Hernández Ramírez se burlaba de su forma de vestir, despreciaba sus capacidades y experiencia de trabajo con la comunidad, no respetaba su criterio para la realización de proyectos y le llegó a negar el ingreso a espacios que eran esenciales para su labor, fueron algunas de sus actitudes.
Por supuesto eso no sólo afectó su vida emocional, sino también, el buen ejercicio de su labor profesional, pues según ella, no tuvo respaldo para el buen desarrollo de su trabajo.
Describe que “Durante el último mes de trabajo la situación fue insostenible, sus constantes amenazas con retirarme del cargo se convirtieron en gritos en su oficina, desprecio y sabotaje explícito a mi trabajo (como su no asistencia a eventos organizados con su previa aprobación), llegando a manipular información para aparentar la supuesta incompetencia de mi parte e incluso calumniándome. Parecía empecinado en que ninguno de mis proyectos funcionara.”
Se lee en otro aparte de la denuncia, que “Debido a que no he recibido ninguna atención formal como víctima de acoso laboral y discriminación de género, he decidido exponer estos hechos, porque no está bien aceptar o normalizar estos ambientes laborales tóxicos y sin derechos laborales, el miedo no puede ser más fuerte. La palabra de un funcionario incompetente no puede ser la única.
(Le puede interesar: “Impunidad en la Cancillería colombiana al omitir sanciones a sus funcionarios por faltas graves.”)
El Cónsul se empeñó en despedirme, y lo pudo hacer sin ninguna oposición o revisión sobre mi real desempeño. Desconoció la convocatoria y contrató a otra persona (hombre, porque en la lista de otros elegibles había solo mujeres) por encima del proceso público abierto por Colombia Nos Une.”
Conozca el texto completo de la denuncia haciendo clic aquí.
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